top of page

Examíname oh Dios!

Actualizado: 5 mar 2024


Cuando tengo una petición que me consume, que considero en mi angustia que algo o alguien está en peligro, se intensifica mi oración, la frecuencia con la que me dirijo al Padre, mi clamor, mi ruego, mi devoción etc.


Sin embargo dice la Biblia  que lo que más debo fortalecer y cuidar en los momentos en que mi clamor esta subiendo al Padre, es mi santidad, no puedo pretender acercarme a Dios, hacerle mi petición, derramar mí corazón,  si mantengo una manera vana de vivir, de hablar o de pensar.


Lo primero que debo anhelar es la pureza en mi vida, estar libre de pensamientos y obras que ofenden a Dios y acercarme a Él con un corazón arrepentido, humillado y puro.


Para conectar mi espíritu con Dios debo buscar parecerme a Él, agradarle, glorificarle, así que debo revisar mi corazón para que no albergue sentimientos o deseos perversos, amargos o negativos.

 

Salmo 139: 23-24

Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón;

Pruébame y conoce mis pensamientos;

 Y ve si hay en mí camino de perversidad,

Y guíame en el camino eterno.

 

 
 
 

Comments


  • Facebook
bottom of page